jueves, 10 de marzo de 2011

SISTEMA DEMOCRÁTICO LIBERAL GRUPO UNO

INTEGRANTES:
ALEJANDRA COQUE
DIEGO ALEGRIA
INGRITH BOLIVAR
MARYI COQUE
WILDER SALAZAR
YULI TATIANA RUIZ

SISTEMA POLÍTICO DEMOCRATICO LIBERAL

SISTEMA DEMOCRATICO

El término democracia proviene del antiguo griego  y fue acuñado en Atenas en el siglo V a.C. a partir de los vocablos («demos», que puede traducirse como «pueblo») y (krátos, que puede traducirse como «poder» o «gobierno»).

 Sin embargo la significación etimológica del término es mucho más compleja. El término «demos» parece haber sido un neologismo derivado de la fusión de las palabras demiurgos (demiurgi) y geomoros (geomori). El historiador Plutarco señalaba que los geomoros y demiurgos, eran junto a los eupátridas, las tres clases en las que Teseo dividió a la población libre del Ática (adicionalmente la población estaba integrada también por los metecos, esclavos y las mujeres). Los eupátridas eran los nobles; los demiurgos eran los artesanos; y los geomoros eran los campesinos. Estos dos últimos grupos, «en creciente oposición a la nobleza, formaron el demos». Textualmente entonces, «democracia» significa «gobierno de los artesanos y campesinos», excluyendo del mismo expresamente a los ilotas (esclavos) y a los nobles.

De todas formas, el significado del término ha cambiado con el tiempo, y la definición moderna ha evolucionado mucho, sobre todo desde finales del siglo XVIII, con la sucesiva introducción de sistemas democráticos en muchas naciones y sobre todo a partir del reconocimiento del sufragio universal y del voto femenino en el siglo. Hoy en día, las democracias existentes son bastante distintas al sistema de gobierno ateniense del que heredan su nombre.

Para el sistema democrático es muy importante la igualdad de oportunidades políticas de los ciudadanos.

Clásicamente la democracia ha sido dividida en dos grandes formas:


  • Democracia directa: el pueblo reunido en asamblea o consejo, delibera y toma las decisiones que van a regular la vida en sociedad.
  • Indirecta o representativa: el pueblo se limita a elegir representantes para que estos deliberen y tomen las decisiones, de forma jerárquica.

Algunos autores también distinguen una tercera categoría intermedia, la democracia semidirecta, que suele acompañar, atenuándola, a la democracia indirecta. En la democracia semidirecta el pueblo se expresa directamente en ciertas circunstancias particulares, básicamente a través de tres mecanismos:


  • Plebiscito. El pueblo elige «por sí o por no» sobre una propuesta.
  • Referéndum. El pueblo concede o no concede la aprobación final de una norma (constitución, ley, tratado).
  • Iniciativa popular. Por este mecanismo un grupo de ciudadanos puede proponer la sanción o derogación de una ley.
  • Destitución popular, revocación de mandato o recall. Mediante este procedimiento los ciudadanos pueden destituir a un representante electo antes de finalizado su período.

En la práctica, existen muchas variantes del concepto de democracia, algunas de ellas llevadas a la realidad y otras sólo hipotéticas. En la actualidad los mecanismos de democracia más extendidos son los de la democracia representativa; de hecho, se trata del sistema de gobierno más utilizado en el mundo. Algunos países como Suiza o Estados Unidos cuentan con algunos mecanismos propios de la democracia directa. La democracia deliberativa es otro tipo de democracia que pone el énfasis en el proceso de deliberación o debate, y no tanto en las votaciones. El concepto de democracia participativa propone la creación de formas democráticas directas para atenuar el carácter puramente representativo (audiencias públicas, recursos administrativos, ombudsman). El concepto de democracia social propone el reconocimiento de las organizaciones de la sociedad civil como sujetos políticos (consejos económicos y sociales, diálogo social).

Estas diferenciaciones no se presentan en forma pura, sino que los sistemas democráticos suelen tener componentes de unas y otras formas de democracia. Las democracias modernas tienden a establecer un complejo sistema de mecanismos de control de los cargos públicos. Una de las manifestaciones de estos contrales horizontales es la figura del impeachment o "juicio político", al que pueden ser sometidos tanto los presidentes como los jueces, por parte de los parlamentos, de acuerdo a ciertas constituciones, como la de Argentina, Brasil o Estados Unidos. Otras agencias más modernas orientadas al mismo fin son el defensor del pueblo u ombudsman, las sindicaturas de empresas públicas, los organismos de auditoría, las oficinas de ética pública, etc.

DEMOCRACIA EN COLOMBIA.

Dentro del ámbito político en el que se ve inmiscuido toda nación, de manera especial una nación que se declara democrática, y un país como el nuestro que se proclama desde su constitución un Estado social de derecho, aparecen dos aspectos que sus fundamentales en su funcionamiento: democracia y legitimidad.

Aparentemente, pareciera que todo gobierno que es elegido democráticamente, fuese legitimo, pero se ha de decir, que no siempre, ya que la legitimidad proviene del respaldo del pueblo a los actos del gobierno, y la democracia no se agota solamente en la derecho del pueblo a elegir.

De esto, que en nuestro país, la democracia sea tan mal entendida por aquellos que por ignorancia no saben el gran poder de esta y la manipulación sin escrúpulos de algunos que más dotados de “sabiduría”, se aprovechan del pueblo para tratar de legitimar sus acciones políticas.

Y se dice, tratar de legitimar por que por medio de esta manipulación de la “conciencia inconsciente” del pueblo, prometiéndoles cualquier cantidad de cosas que nunca les van a cumplir, hacen suyos de la manera más vil, el poder de todo un pueblo humilde, y pasan del interés común que es tan popular en las campañas electorales, al interés particular tan popular en los periodos de gobierno.

Lo interesante en la relación entre democracia y legitimidad, es que aunque una de las características primarias de la democracia es que se presenta como legitima, esta misma se viene en su contra cuanto,  no se muestran los resultados prometidos por parte de los candidatos que han sido elegidos para algún cargo de representación política.

Cuando ocurre esto, la pérdida de legitimidad de un gobierno, pasa algo que la misma democracia lo permite, y es el derecho a oposición, oposición que la mayoría de los gobiernos llaman ilegitima, precisamente por que atacan sus intereses.

En nuestro país, pasan dos cosas de singular relevancia, en primer lugar, el hecho de el mismo pueblo no se dé cuenta lo que están haciendo con él, es decir, el pueblo está siendo utilizado para legitimar su propio empobrecimiento, con propuestas maquilladas como en el TLC y el tan famoso proyecto de desmovilización paramilitar. En segundo lugar, que las pocas personas que saliéndose del común, inician una oposición popular, en defensa de los derechos de todos, son catalogados por el mismo gobierno, como revolucionarios, y en casos más graves aún como terroristas.

Sin embargo, en un país como el nuestro que no cuenta con la conciencia suficiente para saber lo que es y lo que no es la democracia, para saberla utilizar y poner a su favor como debe ser, todas las facultades que esta le brinda, se hace necesario una toma de conciencia social que lleve a la creación de movimientos.

SISTEMA LIBERAL

El liberalismo es un sistema filosófico, económico y político, que promueve las libertades civiles; se opone a cualquier forma de despotismo, suscitando a los principios republicanos, siendo la corriente en la que se fundamentan la democracia representativa y la división de poderes.

Aboga principalmente por:

El desarrollo de las libertades individuales y, a partir de ésta, el progreso de la sociedad.

El establecimiento de un Estado de Derecho, donde todas las personas sean iguales ante la ley, sin privilegios ni distinciones, en acatamiento con un mismo marco mínimo de leyes.

Sus características principales son:

El individualismo, que considera al individuo primordial, como persona única y en ejercicio de su plena libertad, por encima de todo aspecto colectivo.

La libertad como un derecho inviolable que se refiere a diversos aspectos: libertad de pensamiento, de expresión, de asociación, de prensa, etc., cuyo único límite consiste en la libertad de los demás, y que debe constituir una garantía frente a la intromisión del gobierno en la vida de los individuos.

El principio de igualdad entre las personas, entendida en lo que se refiere a diversos campos jurídico y político. Es decir, para el liberalismo, todos los ciudadanos son iguales ante la ley y ante el Estado.

El derecho a la propiedad privada como fuente de desarrollo e iniciativa individual, y como derecho inalterable que debe ser salvaguardado y protegido por la ley.

El establecimiento de códigos civiles, constituciones, e instituciones basadas en la división de poderes (Ejecutivo, Legislativo y Judicial) y en la discusión y solución de los problemas por medio de asambleas y parlamentos.

Las tolerancias religiosas en un Estado laico.

Fusilamiento de Torrijos y sus compañeros en Málaga en 1831. Este grupo de liberales españoles intentó sin éxito acabar con la política absolutista de Fernando VII. Óleo de Antonio Gisbert Pérez (1834-1901).

EL LIBERALISMO SOCIAL.

Defiende la no intromisión del Estado o de los colectivos en la conducta privada de los ciudadanos y en sus relaciones sociales, existiendo plena libertad de expresión y religiosa, así como los diferentes tipos de relaciones sociales consentidas, morales, etc.

Esta negativa permitiría (siempre y cuando sea sometida a aprobación por elección popular usando figuras como referendums o consultas públicas, ya que dentro del liberalismo siempre prevalece el estado de derecho y este en un estado democratico se lleva a su máxima expresión con la figura del sufragio) la legalización del consumo de drogas, la libertad de paso, la no regulación del matrimonio por parte del Estado (es decir, éste se reduciría a un contrato privado como otro cualquiera, pudiendo ser, por tanto, contratado por cualquier tipo de pareja), la liberalización de la enseñanza, etc.

Por supuesto, en el liberalismo hay multitud de corrientes que defienden con mayor o menor intensidad diferentes propuestas.

Liberalismo económico

El liberalismo económico defiende la no intromisión del Estado en las relaciones mercantiles entre los ciudadanos, impulsando la reducción de impuestos a su mínima expresión y reducción de la regulación sobre comercio, producción, etc. La no intervención del Estado asegura la igualdad de condiciones de todos los individuos, lo que permite que se establezca un marco de competencia perfecta, sin restricciones ni manipulaciones de diversos tipos. Esto significa neutralizar cualquier tipo de beneficencia pública, como ser aranceles, subsidios, etc.

El liberalismo político inspiró la organización del Estado de Derecho dentro del marco de la democracia liberal durante el siglo XIX, vigente en gran parte de los Estado-Nación actuales. Sus elementos principales son el Gobierno limitado a sus funciones de seguridad, justicia y obras públicas y la elección de sus representantes de manera libre y soberana. El Estado de Derecho como marco jurídico e institucional resguarda las libertades y los derechos de las personas.

Liberalismo benthamiano

Una división menos famosa pero más rigurosa es la que distingue entre el liberalismo predicado por Jeremías Bentham y el defendido por Wilfredo Pareto. Esta diferenciación surge de las distintas concepciones que estos autores tenían respecto al cálculo de un óptimo de satisfacción social.

En el cálculo económico se diferencian varias corrientes del liberalismo. En la clásica y neoclásica se recurre con frecuencia a la teoría del Homo oeconomicus, un ser perfectamente racional con tendencia a maximizar su satisfacción. Para simular este ser ficticio, se ideó el gráfico Edgeworth-Pareto, que permitía conocer la decisión que tomaría un individuo con un sistema de preferencias dado (representado en curvas de indiferencia) y unas condiciones de mercado dadas. Es decir, en un equilibrio determinado.

Sin embargo, existe una gran controversia cuando el modelo de satisfacción se ha de trasladar a una determinada sociedad. Cuando se tiene que elaborar un gráfico de satisfacción social, el modelo benthamiano y el paretiano chocan frontalmente.

Según Wilfredo Pareto, la satisfacción que goza una persona es absolutamente incomparable con la de otra. Para él, la satisfacción es una magnitud ordinal y personal, lo que supone que no se puede cuantificar ni relacionar con la de otros. Por lo tanto, sólo se puede realizar una gráfica de satisfacción social con una distribución de la renta dada. No se podrían comparar de ninguna manera distribuciones diferentes. Por el contrario, en el modelo de Bentham los hombres son en esencia iguales, lo cual lleva a la comparabilidad de satisfacciones, y a la elaboración de una única gráfica de satisfacción social.

En el modelo paretiano, una sociedad alcanzaba la máxima satisfacción posible cuando ya no se le podía dar nada a nadie sin quitarle algo a otro. Por lo tanto, no existía ninguna distribución óptima de la renta. Un óptimo de satisfacción de una distribución absolutamente injusta sería, a nivel social, tan válido como uno de la más absoluta igualdad (siempre que éstos se encontrasen dentro del criterio de óptimo paretiano).

No obstante, para igualitaristas como Bentham, no valía cualquier distribución de la renta. El que los humanos seamos en esencia iguales y la comparabilidad de las satisfacciones llevaba necesariamente a un óptimo más afinado que el paretiano. Este nuevo óptimo, que es necesariamente uno de los casos de óptimo paretiano, surge como conclusión lógica necesaria de la ley de rendimientos decrecientes.

EL PLURALISMO

El pluralismo como explicación de lo político dentro de un régimen democrático, se fundamenta en la idea  de los grupos sociales como fundamento básico para el desarrollo de la democracia. Entre otras razones, debemos considerar los aspectos del análisis en sus diversas formas como lo son: La respuesta del pluralismo a sus críticos, el pluralismo reformado, el neopluralismo y sus aspectos.

El pluralismo como teoría constituye un enigma, siempre en cuestionamiento porque, a pesar de ser la teoría dominante en los análisis de ciencia política, es considerablemente deficitaria en términos teóricos. Por ello, pluralismo político; en su raíz filosófica está la idea de admitir que un mismo problema tiene varias soluciones.

En política se lo emplea en dos aspectos: como pluralismo ideológico, implica reconocer la legitimidad y legalidad de la existencia en una misma sociedad de diversas ideologías, es decir, de diversas visiones y planes sobre el sentido de la convivencia y las metas de la acción colectiva; y como pluralismo de intereses implica reconocer, no solo su existencia, sino también la necesidad de una compatibilización entre ellos en  la sociedad.

SISTEMA SOCIALISTA GRUPO DOS


INTEGRANTES:
JUAN MANUEL
MARYURI GUERRERO
PAULA VIVEROS
RICARDO CAMPO
VICTORIA M. PIPICANO

SISTEMA SOCIALISTA

CONTENIDO

1.      Introducción. 
2.      Objetivos. 
3.      Sistema Político. 
4.      Sistema socialista: 
4.1.  Que es el sistema. 
4.2.  Características. 
4.3.  Principales exponentes. 
4.4.  Formas de gobierno. 
4.5.  Símbolo 
4.6.  Recomendaciones bibliográficas. 
5.      Bibliografía.

1.      INTRODUCCIÓN.

Este trabajo esta enfocado en el sistema socialista, sus principales características, sus grandes ideológicos como lo fueron VLADIMIR LENIN y KARL MARX, sus formas de gobierno. Como también daremos recomendaciones bibliográficas sobre el tema dicho.
  
2.      OBJETIVOS.

2.1    OBJETIVO GENERAL

Dar a conocer el sistema socialista, sus principales características, los personajes exponentes, su forma de gobierno y recomendar algunas referencias bibliográficas sobre el tema.

2.2    OBJETIVOS ESPECIFICOS.

ü  Determinar que era el Sistema Político Socialista. 
ü  Indicar las principales características del Sistema. 
ü  Enunciar a los principales exponentes del Sistema. 
ü  Proporcionar referencias bibliográficas alusivas al tema.

3.      SISTEMA POLÍTICO

“Para la teoría funcionalista sistema político es la unidad formada por las estructuras políticas. Para el enfoque tradicional jurídico-político es el todo formado por las instituciones. En los dos enfoques, las estructuras van interrelacionadas y son interdependientes y persiguen el fin de la dominación o dirección de la colectividad.

Dentro del primer enfoque se distinguen los sistemas tradicionales: democrático –liberal, socialistas, autoritarios. Para el segundo enfoque existen regímenes o sistemas políticos pluralistas y unitarios, o también sistemas de democracia marxista y autocracia”.

Eduardo Rozo, Diccionario de política y derecho público, ESAP, Bogotá, D.C., 1986.

4.      SISTEMA SOCIALISTA:

4.1    QUE ES EL SISTEMA:

Orden político basado en la apropiación de los medios de producción por parte de la clase obrera.

4.2    CARACTERÍSTICAS.

ü  Los sistemas socialistas, dentro de las diferencias sociales y culturales, de desarrollo económico e incluso políticas que hay entre ellos, poseen una ideología oficial, el marxismo-leninismo.

ü  La concepción del Estado como instrumento de dominación de clase.

ü  La existencia de un sistema de partido único o de partido hegemónico.

ü  El centralismo democrático como principio de organización del partido y del Estado.

ü  Sistema económico centralizado basado en la propiedad colectiva de los medios de producción.

4.3    PRINCIPALES EXPONENTES.

ü   VLADIMIR LENIN:


Se conoce como leninismo al conjunto de aportes políticos, económicos y filosóficos desarrollados por el líder bolchevique Vladimir Lenin dentro del marxismo.

Uno de los aportes más importantes de Lenin fue en la cuestión de la organización comunista. Argumentaba que la lucha económica del proletariado sólo lo llevaría a adquirir una ideología sindicalista y que la conciencia marxista y revolucionaria debían ser introducidas desde fuera.

Además, planteaba que la clase obrera, para llevar a cabo su actividad revolucionaria, debería de contar con un destacamento de vanguardia que dirigiera su lucha, el Partido Comunista.
Según Lenin, los objetivos del partido sólo podrían ser alcanzados a través de una forma de organización disciplinada conocida como centralismo democrático.

El Leninismo mantiene que el imperialismo es el estadio más alto del capitalismo, y que el capitalismo sólo puede ser vencido a través de los medios revolucionarios.

Lenin creía en la destrucción del Estado capitalista a través de la revolución proletaria, y en reemplazar a ese Estado por la dictadura del proletariado (un sistema de democracia de los trabajadores, en el que los trabajadores tendrían el poder político a través de consejos llamados soviets).

La teoría de Lenin sobre el imperialismo tenía como objetivo mejorar la obra de Karl Marx explicando un fenómeno que Marx no había predicho: el Capitalismo que se convierte en un sistema global (Marx había descrito un sistema nacional). En el centro de esta teoría del imperialismo está la idea de que las naciones capitalistas avanzadas están intentando evitar la revolución forzando a que su sobreproducción entre en los mercados coloniales y explotando los recursos de estas colonias. Esto permitía a las naciones capitalistas industrialmente avanzadas el mantener contentos a sus trabajadores, en parte también a través de la creación de una aristocracia obrera. Como resultado el capitalismo sería dirigido por ese sector privilegiado o aristocracia obrera, representada por los partidos socialdemócratas, hasta el punto de que la revolución no ocurriría en las naciones más avanzadas (como Marx había previsto) sino en el Estado imperialista más débil: Rusia.

Si la revolución solo puede llevarse a cabo en un país subdesarrollado esto conlleva un problema serio: ese país no será capaz de desarrollar un sistema socialista (en la teoría marxista el socialismo es el estadio que sucede al capitalismo, antes de llegar al comunismo), porque el capitalismo no ha seguido su curso completo todavía en ese país, y porque los poderes extranjeros intentarán acabar con la revolución a cualquier costo. Para solucionar este problema Lenin propone dos posibles soluciones:

1.    La revolución en un país subdesarrollado desata una revolución en un país capitalista desarrollado (por ejemplo, Lenin esperaba que la Revolución Rusa provocaría una revolución en Alemania). El país desarrollado establece el Socialismo y ayuda al subdesarrollado a hacer lo mismo.

2.    La revolución tiene lugar en numerosos países subdesarrollados al mismo tiempo o en una sucesión rápida; los países subdesarrollados se juntan en un estado federal capaz de intimidar a las potencias capitalistas y establecer el Socialismo. Esta era la idea original durante la fundación de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).

El socialismo no puede sobrevivir sólo en un país pobre y subdesarrollado. Por eso, el Leninismo aboga por la revolución mundial en una forma u otra.

ü  KARL MARX

Doc. 4. El Sistema Social-Marxista.

Las llamadas “democracias marxistas” han sido denominadas de varias formas: democracias orientales, sustanciales, sistemas socialistas o de masas proletarias, económicas y marxistas. Hemos preferido la expresión democracia marxista por cuanto que se reconduce a los principios doctrinales enunciados por K. Marx.

Según los principios de materialismo dialéctico-histórico-marxista, la infraestructura de las sociedades está constituida por su economía, y más específicamente, por las técnicas de producción. Las técnicas de la producción son, en último análisis, quienes condicionan los grupos sociales, pues para el marxismo la infraestructura determina las superestructuras. Pero la realidad es dialéctica. Ningún supuesto social es dado de una vez para siempre. En el seno mismo de una determinada sociedad existen clases en lucha. Las modificaciones de las técnicas de producción traen como consecuencia la elevación de una clase en detrimento de otras: terratenientes, burguesía y proletariado, son las clases en lucha desde el Medievo a nuestros días. Pero, mientras evoluciona la infraestructura material, las superestructuras, a las que se aferran las clases privilegiadas, se resisten. Cederán inevitablemente su lugar a las nuevas superestructuras correspondientes a la nueva realidad material y objetiva, pero al precio de una revolución, por la que las clases ascendentes destruirán las hasta ese momento privilegiadas.

Para el marxismo, la democracia clásica es una democracia formal en el sentido de que, mientras perdure la existencia del principio de la propiedad privada de los medios de producción, el Estado continuará siendo un instrumento de explotación en manos de la burguesía y las libertades declaradas en la Constitución serán también formales en cuanto que el proletario no podrá ni realizar, por falta de medios, ni competir con los capitalistas. En régimen capitalista, la democracia, según el marxismo, no puede ser más que forma y encubre, en realidad, la monopolización del poder por la clase burguesa. Las libertades declaradas en la Constitución sólo son reales para los detentadores del dinero, y el sufragio —dirá Lenin— no será más que un medio que tienen los oprimidos de cambiar de opresores, pero no para eliminar la opresión. De ahí la necesidad de la revolución.

Solamente con la destrucción del capitalismo el proletariado llegará a ser libre. Se eliminará la explotación del hombre por el hombre. El marxismo promete al proletario no garantizar una libertad que no tiene, sino su liberación de la explotación.

Las fases para llegar a una democracia marxista en la que el hombre será libre, en cuarto liberado de la explotación y de la subordinación a las fuerzas de la naturaleza, serán tres: dictadura del proletariado, socialismo o fase inferior y comunismo o fase superior.

El problema de las limitaciones al poder de los gobernantes no se plantea en la fase superior, pues en la sociedad comunista habrá desaparecido el Estado y los gobernantes. Se estará en presencia de una democracia total, de autogestión social integral.

En la fase de la dictadura del proletariado y socialista se concibe la libertad, exclusivamente, como una participación de cada ciudadano en la construcción del comunismo; por tanto, no tiene sentido hablar de libertades-resistencia, ni de limitaciones a los gobernantes. Las libertades se conciben como medios al servicio del interés de la revolución proletaria y el Estado es el dador de estas condiciones de libertad. El Estado es el instrumento liberador del proletario y, en consecuencia, resistirle a él es resistir la marcha hacia la liberación de la explotación de la clase proletaria.

Juan Ferrando Badia, (Coordinador) Regímenes políticos actuales, Tecnos, Madrid, 1997.

4.4    FORMAS DE GOBIERNO.

ü  Partido Único: se rechaza el pluralismo político de tipo occidental. Son declaradas ilegales las fuerzas que se oponen al sistema y sólo se permiten las asociaciones políticas, sociales o sectoriales vinculadas al partido único.

ü  Partido Hegemónico: existe un pluralismo político formal que permite la actuación de fuerzas políticas herederas de partidos anteriores al establecimiento del sistema, pero que en ningún caso ponen en cuestión el papel preponderante del partido marxista-leninista en la vida política y en la dirección del Estado.

4.5    SÍMBOLO.


 4.6    RECOMENDACIONES BIBLIOGRÁFICAS.

ü  El Capital De K. Marx.

ü  El Asesinato de Trosky

ü  El Cerebro de Lenin. / Lenin`S Bran.

ü  Documental da Revolución Rusa Año 2007/ Producción Instituto De Pensamiento Socialista.

ü  Soy Cuba 1964/ Director Mijail Kalatozow/ Película Cubana Soviética.

3.      BIBLIOGRAFÍA

ü  http://es.wikipedia.org/wiki/Socialismo

ü  http://es.wikipedia.org/wiki/Leninismo

ü  http://www.aporrea.org/actualidad/a16007.html.

ü  http://www.biografiasyvidas.com/monografia/marx/

ü  Sistemas y Regímenes Políticos/ Jairo Díaz Pinzón.